Antonio Celia Cozarelli, visionario barranquillero. |
Antonio Celia Martínez- Aparicio, barranquillero, presidente de
Promigas, es huella para Barranquilla en sus 200 años.
Es de esos líderes de empresas que marcan un camino e imponen un reto en ocasiones exigente pero definitivamente a favor del progreso no solo del colectivo que le acompaña desde la organización que lidera, sino hacia el beneficio de toda una sociedad.
Su liderazgo ha permitido que el uso del gas se
haya masificado en pocos años en Colombia y que el país llegue a ser una
potencia regional. Es catalogado como visionario y mecenas de la cultura barranquillera respaldando y confiando en iniciativas como la Fundación La Cueva, La Fundación Cinemateca del
Caribe, la Fundación Carnaval de Barranquilla, el Museo del Caribe y emisoras
culturales. A través de la Fundación Promigas y la Fundación Empresarios por la
Educación ha promovido la educación de calidad y ha logrado que los proyectos
de Promigas sean ejemplo en materia de RSE a nivel regional e internacional.
Al frente de Promigas ha estado 18
años, logrando que la empresa crezca con su producto y el talento de su recurso humano, que con el uso de sus servicios mejore
la calidad de vida de millones de habitantes, la mayoría de ellos en estratos
bajos, convirtiéndose en modelo a seguir en el desarrollo de la industria del
gas natural. Estos pasos son los que conducen a Barranquilla en sus 200 años a seguir siendo una Ciudad Abierta al Mundo y con ella, Celia Martínez-Aparicio deja huella en el Bicentenario.
Don Antonio Celia es descendiente de los Martínez Aparicio (Gabriel, Senén, Carlos y Segio). Todos ellos estuvieron vinculados al cine desde sus inicios. Así, Senén acompañó a Ernesto Vieco en su aventura de llevar al cine a todos los rincones del país, cuando el calendario decía que era el año 1897. De hecho, Senén era el dueño del 50% del aparato de Cinematógrafo que compraron a alguien por valor de 600 pesos de la época (Una fortuna).Carlos Martínez Aparicio fue cofundador de la Empresa Nacional de Kinematógrafo "Universal" en 1913; pero antes, era socio de Abraham Zacarías López Penha en "López Penha y Cía", en 1912. Gabriel Martínez Aparicio, su hermano, fundó, en 1912, el Salón Líbano (carrera 45 con calle 43), donde daban cine con el telón al fondo. De manera que todos podían ver las películas de frente y no como en los otros donde el telón era colocado en medio de la sala y los que querían verla de frente pagaban 20 centavos; los otros la veían al revés y pagaban solo 10. Entonces, algunos se especializaron en leer de atrás para adelante y cobraban por eso a los que no podían hacerlo. Gabriel, posteriormente, fue el representante oficial de "Kine Universal" en la ciudad de París. Por su parte, Sergio Martínez Aparicio era el gerente del Kine "Universal" en Bogotá. Más tarde, en 1928, fueron los fundadores del periódico "La Prensa", de grata recordación.
ResponderEliminarCarlos y Gabriel eran hijos del General Gabriel Martínez Aparicio, quien, a su vez, era hijo de don Antonio Martínez Aparicio y doña Francisca Visbal quien era natural de Sitio Nuevo, Departamento del Magdalena.
Antonio Martínez Aparicio fue el Padre del General Gabriel Martínez Aparicio Visbal, y éste, a su vez, lo fue de Carlos y Gabriel, ambos relacionados con la historia del cine en nuestra ciudad.
El General Gabriel Martínez Aparicio falleció en Bogotá el 11 de diciembre de 1923.se había casado con doña Catalina Angulo en la población de Heredia, Parroquia de Tenerife, en el Magdalena, el 8 de febrero de 1890. Fueron sus hijos los siguientes: Sara Isabel, Gabriel Erasmo (nacido el 31 de diciembre de 1890 y casado con María Gerlein en 1921); CarlosTomás (nacido el 21 de diciembre de 1891 y casado con doña Helena Grau Vives en 1917. Doña Helena era hermana del conocido personaje barranquillero el “Ñato Grau”). Otros hijos fueron: Antonio, Ricardo y Francisco, a más de tres que fallecieron a temprana edad, a saber: Cecilia, Roberto y Rafael.
De Carlos sabemos que, luego de retirarse del negocio del cine viajó a Francia a continuar estudios. De Gabriel, nada se pudo conocer, pero para nadie es un secreto que ambos incursionaron en el periodismo, fundando el periódico “La Prensa” el 17 de febrero de 1928, según la fuente del periodista Aureliano Olaciregui (“La Prensa en Barranquilla”), pero según nuestras propias pesquisas, anteriormente (1927) se había formado la sociedad “Martínez Aparicio, Fernández & Co.” De manera que, si Carlos y Gabriel se habían iniciado en el negocio del cinematógrafo cuando tenían 20 y 21 años de edad, respectivamente, en el periodismo se involucraron cuando ya habían alcanzado los 36 y 37 años de edad.
José Nieto, interesante aporte para seguir construyendo y compartiendo la celebración de los 200 años de historia de Barranquilla.
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